El tráfico en Constitución ha colapsado gran parte de la ciudad debido a los cierres provocados por las obras de la Línea 6 del Metro. Pese a las promesas iniciales del Gobierno estatal de que se utilizaría un método constructivo que minimizaría las afectaciones viales, la realidad ha sido completamente opuesta. Los carriles exprés de la Avenida Constitución permanecen cerrados por los trabajos del monorriel, generando un panorama caótico que ha tomado por sorpresa a miles de automovilistas.
En el segundo día de cierres, las filas interminables de autos no solo afectaron el Par Vial, sino que se extendieron a importantes avenidas y calles de colonias, complicando la movilidad en gran parte de la ciudad. Guadalupe figura entre los municipios más afectados, ya que el congestionamiento no se limita a las horas pico, sino que se prolonga a lo largo de todo el día, atrapando a conductores durante horas.
Los residentes y usuarios frecuentes de la vía se sienten traicionados, pues confiaban en las declaraciones oficiales que aseguraban un impacto mínimo. Hoy, la paciencia de los ciudadanos está al límite mientras buscan rutas alternas que también terminan colapsadas.

Promesas incumplidas y frustración por tráfico en Constitución
En febrero de 2023, el Secretario de Movilidad estatal, Hernán Villarreal, afirmó con firmeza que las obras no cerrarían vialidades completas. Explicó que se implementarían reducciones de carriles y desvíos controlados, pero se garantizaría el acceso a viviendas y negocios, y se mantendría el paso del transporte público. Estas declaraciones parecían dar tranquilidad, sin embargo, la situación actual del tráfico en Constitución demuestra que estas promesas no se cumplieron.
Dos meses después, el Gobernador Samuel García admitió públicamente que habría molestias y se dijo preparado para recibir críticas, argumentando que los grandes proyectos requieren sacrificios. Sin embargo, la magnitud del problema ha superado cualquier expectativa negativa. Conductores como Víctor Bernal relatan que nunca habían visto tal nivel de tráfico en horarios matutinos. José, un taxista atrapado en el caos, comparó la situación con la de la Ciudad de México y la calificó de “insoportable”.
La frustración se refleja también en el uso excesivo de calles internas de colonias para evitar los puntos de mayor embotellamiento, lo que ha provocado nuevos conflictos y saturación en zonas residenciales.
Repercusiones del tráfico en Constitución
El impacto del tráfico en Constitución no se limita a la avenida principal. Las repercusiones se sienten en arterias clave como el Bulevar Miguel de la Madrid, Colón, Constituyentes de Nuevo León, Chapultepec, Juárez, Las Américas, Azteca, Pablo Livas y Eloy Cavazos. Estas avenidas, esenciales para la conexión diaria de Monterrey, ahora son escenario de filas interminables y tiempos de espera que se extienden durante todo el día.
La desesperación de los automovilistas por evitar el área de Constitución ha generado una invasión masiva de calles interiores, provocando embotellamientos en zonas que antes eran tranquilas. Esto ha incrementado la molestia de los vecinos, quienes ahora ven sus calles convertidas en rutas alternas improvisadas, con ruido, contaminación y riesgos para los peatones.
La falta de un plan de movilidad integral y la poca anticipación en la comunicación han dejado en evidencia las deficiencias de la estrategia gubernamental. Mientras tanto, el transporte público y servicios de emergencia también enfrentan serias dificultades para cumplir con sus recorridos y tiempos programados.
Posibles soluciones al embotellamiento en Constitución
Ante el creciente descontento generado por el tráfico en Constitución, autoridades de Tránsito de Guadalupe y Monterrey han planteado una posible medida emergente: implementar un contraflujo en la Avenida Morones Prieto. Ismael Treviño, director de Tránsito de Guadalupe, explicó que la idea es habilitar un carril exprés en sentido contrario durante las mañanas, aprovechando el bajo volumen vehicular en ese horario.
Aunque esta propuesta busca aliviar la saturación en Constitución, todavía no tiene una fecha de inicio definida y depende de estudios técnicos y la coordinación entre ambos municipios. Mientras tanto, se han reforzado operativos en avenidas como Benito Juárez, Ruiz Cortines, Chapultepec, Eloy Cavazos y Miguel Alemán para intentar mitigar los problemas.
Treviño reconoció que los primeros días de cierres han sido especialmente difíciles, con congestionamientos que se extienden incluso fuera de los horarios pico. Pese a los esfuerzos, la percepción ciudadana apunta a que las soluciones actuales resultan insuficientes para un problema de tal magnitud.
La ciudadanía exige una planificación más efectiva y medidas reales que respondan al caos generado, pues el desgaste emocional y económico por el tráfico en Constitución sigue en aumento.
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