A tres meses de haberse instalado la Comisión Ambiental Metropolitana en Nuevo León, ciudadanos y organizaciones ambientalistas denuncian que las acciones anunciadas por el gobernador Samuel García no han pasado de ser promesas vacías. A pesar del discurso oficial que presume avances y colaboración interinstitucional, en los hechos la contaminación sigue sin reducirse, y las decisiones de fondo se siguen postergando.
La comisión, integrada por autoridades estatales, municipales y federales, fue presentada como un órgano técnico con enfoque en la coordinación. Sin embargo, activistas señalan que no hay resultados concretos ni cambios visibles en la calidad del aire, y que las medidas anunciadas son más simbólicas que efectivas. “Se están tomando la foto, pero no hay compromisos reales”, advirtió Liliana Flores, activista del Grupo de las Seis.

Contaminación en Nuevo León: solo una multa y una propuesta
Durante las nueve sesiones que ha sostenido la Comisión desde su instalación el 3 de marzo, los anuncios relevantes pueden contarse con los dedos de una mano. La multa de 80 millones de pesos impuesta a la empresa Ternium por contaminar el arroyo La Talaverna fue uno de los pocos actos concretos, y aun así fue considerado un caso aislado.
En la última sesión, el gobernador Samuel García propuso la creación de una División Ambiental dentro de Fuerza Civil, que se encargaría de sancionar delitos graves contra el medio ambiente. Sin embargo, no se ha explicado cómo funcionaría ni cuándo estaría operando, lo que refuerza la idea de que estas medidas son más de forma que de fondo.
Iniciativas de la Comisión Ambiental sin fecha de ejecucción
Otros planteamientos, como escalonar horarios laborales o hacer obligatorio el transporte escolar, fueron mencionados por el secretario de Movilidad, Hernán Villarreal, como acciones que ayudarían a reducir la carga vehicular y, con ello, la emisión de contaminantes. No obstante, no se ha fijado ninguna fecha de implementación, ni se ha informado si existe el respaldo suficiente para aplicarlas.
Además, medidas prometidas desde marzo, como el retiro de circulación de los vehículos más contaminantes, siguen sin materializarse. Lo mismo ocurre con la coordinación entre municipios y estado, que sigue siendo una tarea pendiente sin estrategias claras.
Opacidad en la Comisión Ambiental
La mayor parte de las reuniones de la CAMe se han celebrado a puerta cerrada, limitando el acceso a la información y alimentando la desconfianza ciudadana. Solo la sesión de instalación y una reunión celebrada el 12 de mayo fueron públicas. Esta falta de transparencia ha sido otro de los puntos criticados por colectivos ambientales, quienes acusan que el gobierno solo busca “simular que actúa” sin comprometerse con soluciones estructurales.
Aunque la comisión fue anunciada con el respaldo de la secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, el balance de sus primeros tres meses deja un sabor amargo: promesas sin ejecución, contaminación al alza y ciudadanos que siguen esperando medidas reales.
¿Te interesa saber si las promesas ambientales del gobierno se están cumpliendo?
Revisa el siguiente artículo y conoce los pendientes que siguen sin resolverse en la lucha contra la contaminación en Nuevo León: Muere poco a poco el río Pesquería por contaminación en Nuevo León